Los gastos de comunidad son una parte esencial de la vida en comunidades de propietarios, donde los residentes comparten los costos de mantenimiento y servicios comunes. Sin embargo, surge la pregunta: ¿Qué gastos de comunidad deben pagar los locales comerciales dentro de estas comunidades? Esta cuestión, aunque aparentemente sencilla, puede generar debates y confusiones entre propietarios y gestores de comunidades. Exploraremos esta problemática y los criterios que suelen aplicarse para determinar qué gastos deben pagar los locales comerciales.
Gastos ordinarios y extraordinarios que deben pagar los locales comerciales:
Los gastos de comunidad se dividen generalmente en dos categorías: ordinarios y extraordinarios. Los gastos ordinarios son aquellos necesarios para el mantenimiento regular de la comunidad, como limpieza, jardinería, iluminación de áreas comunes, administración, seguro del edificio, etc. Por otro lado, los gastos extraordinarios son aquellos imprevistos o no recurrentes, como reparaciones estructurales, obras de mejora, etc.
La Ley de Propiedad Horizontal sobre el gasto de comunidad de los locales comerciales:
En muchos países, incluida España, la Ley de Propiedad Horizontal establece las reglas básicas para la organización y administración de comunidades de propietarios. Según esta ley, los locales comerciales están obligados a contribuir en los gastos generales de la comunidad en función de su coeficiente de participación, que suele estar determinado en función de la superficie del local respecto al total de la comunidad. Esto significa que los locales comerciales deben asumir una parte proporcional de los gastos de comunidad, tanto ordinarios como extraordinarios.
Criterios de reparto de gastos de comunidad:
Aunque la Ley de Propiedad Horizontal proporciona una guía general, en la práctica pueden surgir disputas sobre qué gastos deben asumir los locales comerciales. Algunos criterios que suelen considerarse incluyen:
- Uso de los servicios comunes: Si un local comercial hace uso directo de servicios como la luz de las zonas comunes, el ascensor, el agua para riego, etc., es razonable que contribuya en mayor medida a los gastos asociados a estos servicios.
- Beneficio obtenido: Se puede argumentar que los locales comerciales se benefician directamente del mantenimiento y la buena imagen de las áreas comunes, lo que puede justificar su contribución proporcional en los gastos.
- Superficie y ubicación: En algunos casos, se puede establecer un criterio de reparto basado en la superficie y ubicación de los locales comerciales dentro del edificio, asignando una cuota fija o un coeficiente de participación diferente según estos factores.
